La rentrée. Es como los franceses llaman a "la vuelta al cole". Con la diferencia que acá la rentrée abarca a la vuelta a todas las actividades después de unas largas vacaciones, para grandes y chicos.
En Francia las vacaciones normales son de 5 semanas, mínimo. Esto es con una jornada de 35hs por semana pero para muchos trabajos (en general todos los de oficina) que las jornadas son más largas (9/18,19h) esas horas se compensan con más vacaciones prevista por la ley y llegando a acumular así unas 8 o 9 semanas al año. Impensable para los que crecimos acostumbrados a 2 semanas (10 días hábiles!!) en todo el año. La diferencia de trabajar para vivir y vivir para trabajar.
Y ni hablo de algunos sectores como los bancos donde se suman más todavía...
Esto hace que en verano la gente se tome 3 semanas o 1 mes de vacaciones. Y es normal. París en Agosto se transforma. La ciudad se vacía. Un poco como Buenos Aires las primeras semanas de enero pero más drástico todavía. El mes entero hay negocios que cierran, las actividades se suspenden, se vacían las terrazas de los bares, un verdadero parate.
Como consecuencia, la vuelta de este período de descanso es todo un tema. Se escuchan frases como: "Este mes imposible, con la rentrée y todo..." o empresas que se excusan por no poder responder a los pedidos porque están muy cargados con la vuelta de vacaciones porque no trabajaron el mes anterior. Las vacaciones son respetadas como un derecho y no está visto como: "Sos un poco vago y te tomaste vacaciones, cómo no organizaste todo (hacer que alguien se quede) para que la maquinaria siga funcionando exactamente igual".
Volver a armar la rutina cuesta más de lo pensado. Cuando tenés una actividad fija es más fácil, el simple hecho de volver a los horarios y lugares habituales hace más fácil la aclimatación. Aunque en general les cuesta una semana en retomar ritmo de crucero... los primeros días son más café y contarse las vacaciones con cada uno que te reencontrás que otra cosa.
Pero si no tenés una actividad fija, como en mi caso, y tu rutina estaba conformada por un conjunto de actividades magistralmente orquestradas y que todas se vieron interrumpidas por las vacaciones, la reorganización es más complicada. Es barajar y dar de nuevo. Da lugar a cuestionarte sobre la continuidad de algunas de esas actividades, el comienzo de otras, el cálculo en tiempo y costo, y tratar de meter todo eso en una sola semana.
Así fue mi rentrée, caótica... y todavía no está ganado. Pero por las dudas ya me ocupé de organizar mi próximo descanso: tenemos los pasajes para ir con M a pasar Navidad en Argentina. Mi ciudad, mi familia y mis amigos. :-)
Volver de las vacaciones viviendo en París también es perder 15º de un día para el otro si estuviste en algún lugar con playa."El" mes para irse es agosto... como irse en febrero en Argentina y a la vuelta ya es marzo... y llega el otoño. Y en París el clima otoñal se hace sentir rápidamente. Aparecen las ganas de comer cosas más contundentes, pasar la merienda con un yogur se complica.
Hoy les dejo la receta del Pain d'épices. Receta rescatada de este verano de una amiga francesa instalada en Madrid, Patricia.
Un budín muy especiado, al que no le gustan las especias abtenerse, pero para los que sí les gusta, este budín va a perfumar toda la casa mientras se cocina. Dulce pero no mucho, es un budín bien húmedo y esponjoso, para comer solo, tostarlo con un poquito manteca o el clásico francés acompañando el foie gras.
PAIN D'ÉPICES:
- 250 g de harina integral
- 20 cl de leche (descremada es posible)
- 150 g de miel líquida
- 60 g de azúcar morena
- 1 buena cdta de polvo royal
- 1 buena cdta de bicarnonato de sodio (se compra en cualquier farmacia y es para hacer el budín más esponjoso)
- 2 cdtas de especies (anís, jengibre seco, nuez moscada, clavo de olo y pimienta) Juntar todo y moler con un mortero.
- 250 g de harina integral
- 20 cl de leche (descremada es posible)
- 150 g de miel líquida
- 60 g de azúcar morena
- 1 buena cdta de polvo royal
- 1 buena cdta de bicarnonato de sodio (se compra en cualquier farmacia y es para hacer el budín más esponjoso)
- 2 cdtas de especies (anís, jengibre seco, nuez moscada, clavo de olo y pimienta) Juntar todo y moler con un mortero.
- 1/2 cdta de canela en polvo
- 1/4 de cdta de cardamomo (si no es molido, sacar las semillas negras de adentro de cada semilla de cardamomo y moler con el mortero o con la parte de atrás de una cuchara)
- 2 cdas de agua caliente (para diluír el bicarbonato)
- 1/4 de cdta de cardamomo (si no es molido, sacar las semillas negras de adentro de cada semilla de cardamomo y moler con el mortero o con la parte de atrás de una cuchara)
- 2 cdas de agua caliente (para diluír el bicarbonato)
1/ Precalentar el horno a 150°C. Calentar la leche (tibia) con el azúcar y la miel. Mezclar bien y agregar la harina, la levadura y batir. Agregar el cardamomo molido, la mezcla de especies, la canela y el bicarbonato de sodio diluído en agua caliente. Batir unos segundos para mezclar bien todo.
2/ Poner en un molde de budín enmantecado y cocer al horno durante 40-45 minutos a 150°C.
2/ Poner en un molde de budín enmantecado y cocer al horno durante 40-45 minutos a 150°C.
Y FELIZ PRIMAVERA AUSTRAL!!
No comments:
Post a Comment